Atendiendo a la petición de la directora de la Escola Tres Pins de Barcelona, Esther Molins, ayer se celebró una reunión con el delegado de Juventud, Raúl Ruiz, el vicepresidente y delegado de Educación, Marc Tapia, y el presidente Albert R.Casellas junto con la profesora Pepita Cedillo y dos madres, Consol y Mónica. La escuela mostró su preocupación por el futuro de los adolescentes entre 10 y 13 años y los jóvenes de 16-17 años, ya que suelen estar aislados en casa cuendo no están en la escuela. Se va a buscar una estrategia para que puedan participar más activamente en las actividades de las asociaciones afiliadas y en la comunidad sorda en general, así como también se organizará una jornada informativa dirigida a los padres y madres para este fin.