El pasado viernes 7 de octubre de 2022 el Ayuntamiento de Barcelona a través del Institut Municipal de Persones amb Discapacitat (IMPD) organizó la l Jornada sobre la soledad no deseada de las personas con discapacidad en el salón de actos de la Biblioteca Vilapicina y la Torre Llobeta de Barcelona, enmarcada dentro del plan de actuación del Distrito de Nou Barris.
En la jornada participaron entidades representativas de los colectivos de personas con discapacidad (ONCE, FESOCA, DINCAT, ECOM, ACAPPS), además de representantes de entidades públicas y entidades privadas (Fundació DKV Integralia, IMPD, UOC, etc.), entre otros.
La jornada se organizó y ha estado motivada por la idea de que las personas con discapacidad, sea física, intelectual, por trastorno de salud mental, visual o auditiva, viven situaciones de soledad no deseada, a raíz de un estudio sobre este ámbito y que concluye que existen 3 ámbitos para luchar contra la soledad: la accesibilidad, la participación y la formación en habilidades sociales y emocionales de las personas con discapacidad y que ha sido desarrollado por la cátedra COCEMFE-UOC para la Autonomía Personal y Salud Digital.
El presidente de FESOCA, Albert R. Casellas, formó parte de una mesa redonda moderada por la periodista Elisenda Roca, bajo el título “La colaboración público-privada frente el reto de la lucha contra la soledad no deseada” y casi todas las entidades estuvieron de acuerdo con las conclusiones del estudio realizado.
En este caso, Albert comentó que “las entidades somos imprescindibles para cubrir las necesidades de los colectivos de personas con discapacidad, ya que somos los que conocemos las necesidades que tenemos pero que para llevar a cabo el trabajo precisamos de la colaboración, sensibilización e implicación de las Administraciones Públicas que son las que disponen de presupuestos para hacerlas efectivas”.
Las principales reivindicaciones para combatir la soledad no deseada por parte de los representantes de los colectivos de la discapacidad, se basaron en la eliminación de las barreras de accesibilidad que impiden a las personas con discapacidad participar en igualdad de condiciones y socializarse; fomentar la independencia y autoestima a todos los niveles, de la persona con discapacidad para que no dependa de la familia, los servicios públicos; etc.
La jornada contó con diferentes medidas de accesibilidad, como interpretación a la lengua de signos catalana, subtitulación en directo, equipos de bucle magnético, espacio sin limitaciones para personas con movilidad reducida, etc.
Debido al gran interés suscitado, durante el mes de noviembre se van a organizar otras jornadas.
