Ayer se celebró la reunión convocada por la subdirectora general de Política Lingüística de la Consejería de Cultura de la Generalitat de Catalunya, Marta Xirinachs, que supuso el pistoletazo de salida para la creación de un equipo de trabajo y de una comisión asesora para iniciar la adaptación de los niveles de competencia en LSC al Marco Europeo Común de Referencia de las Lenguas mediante la creación de programas y programaciones de la LSC. Es uno de los compromisos adquiridos tras la firma del convenio entre FESOCA y dicha consejería en marzo de 2015, lo que se prevé que este proceso dure unos siete años, siempre que no ocurra nada extraordinario que lo impida. A diferencia de las lenguas orales, la lengua de signos aún no dispone de herramientas y recursos de aprendizaje válidos y fácilmente accesibles, además de que son muy escasos y no necesariamente fiables. Formarán parte de este proceso técnicos de Política Lingüística, de FESOCA, de la Universitat Pompeu Fabra, de la Universitat de Barcelona y profesores de lengua de signos.
